LA GRAN ENCRUCIJADA
Entonces aparece una crisis existencial y un dilema que se extiende durante años en el que, como en la canción te preguntas…
“Should I stay, or should I go?”
Pero el principal problema es que no sabes a dónde ir porque no sabes qué quieres en tu vida. Y encima reinventarse a casi los 40 es todo una pesadilla..
En esa situación de desesperación y bloqueo total, ves una foto en Instagram con la famosa frase de Confucio que dice:
“Elige un trabajo que te apasione y no tendrás que trabajar ni un día de tu vida
Entonces ves la luz al final del tunel: “¡Tengo que buscar un trabajo que me guste, que me apasione!”
Y empieza la búsqueda de la pasión, que se convierte en un reto personal comparable con la búsqueda del Santo Grial.
Sientes que todo encaja y que ese es el ingrediente necesario para reinventarse profesionalmente con éxito.
Y en esa búsqueda, empiezan a aparecer ante ti miles de blogs y gurus que te muestran mensajes del tipo “encuentra tu pasión y vive de ella”.
Todos queremos levantarnos con ilusión cada día y ganarnos la vida con un trabajo que nos gusta.
Pero el peo es que la pasión es habitualmente malinterpretada, porque tener pasión por algo no es lo mismo que hacer lo que te gusta.
Y sobre todo, porque la pasión no se encuentra: la pasión se cultiva.
La pasión está conectada con aquello que amas, no con aquello que disfrutas. Clic para tuitear
¿Pagarías a alguien por hacer algo simplemente porque le gusta?
Estoy seguro de que no.
Quienes te van a pagar no son tus amigos o tu familia, y por tanto les importa un carajo si aquello por lo que estarían dispuestos a pagarte te apasiona.
Las personas te pagarán por el valor que les aportes; les da exactamente igual que lo hagas o no a través de tu pasión.
Esto no significa que no puedas hacer un negocio de tu pasión.
Lo que significa es que, para lograrlo has de aportar valor diferenciador y eso de ser posible, sólo lo conseguirás siendo suficientemente bueno.
En aquello en lo que eres buen@ y te apasiona está tu talento natural. Clic para tuitear
En el talento reside el valor de una persona; sólo a través de tu talento podrás conectar tus pasiones con un negocio que te permita reinventarte profesionalmente.
No obstante, recuerda: aunque tengas mucho talento haciendo algo, nunca será un negocio hasta que alguien te pague por ello.
Si deseas reinventarte profesionalmente es muy probable que lo que te llame sea esa idea de poder ganarte la vida con una actividad que te apasiona.
Es por lo que se envidia a los cantantes, actores, deportistas y hasta politicos ¿no?
¿A quién no le gusta ganar dinero haciendo algo que le empuja a levantarse cada día?
Sin duda es el sueño de muchas personas y entiendo que para ti sea suficiente, y te des por satisfech@ con que esa alternativa a tu trabajo que andas buscando te proporcione esto.
Sin embargo, entre esos artistas y deportistas que viven muy bien haciendo lo que les gusta, hay muchas historias de insatisfacción. Por no decir verdaderos dramas casi novelas.
REINVÉNTATE PONIÉNDOTE AL SERVICIO DE LOS DEMÁS
Hasta este momento he hablado de encontrar el modo de satisfacer tus deseos y el de las personas que estarían dispuestas a pagarte.
Sin embargo, uno de los aspectos fundamentales para alcanzar la realización personal es que la actividad que realices trascienda.
Cuando alguien te paga por hacer algo que de acuerdo a tus valores sientes que tiene un efecto positivo en el mundo, experimentas una satisfacción mucho mayor que la de realizar un trabajo sin más.
Somos gente buena por naturaleza y nos gusta contribuir de un modo positivo en los demás.
Y para hacerlo no es necesario llevar a cabo una actividad excepcional.
UN TRABAJO CON SENTIDO NO SIEMPRE ES SUFICIENTE
Ayudar a los demás le confiere significado a aquello que haces. Clic para tuitear
Por eso las llamadas profesiones “vocacionales” suelen estar muy conectadas con la realización personal; más allá de lo económico, la recompensa se obtiene de la contribución a las necesidades del mundo.
Profesiones como la medicina o la enseñanza son un claro ejemplo de trabajos al servicio de los demás.
Sin embargo, contribuir a las necesidades del mundo no es suficiente.
¿Quién no conoce a un profesor quemado, o a un médico que pasa consulta como si tratara con autómatas?
Por mucho que la actividad que realices contribuya a las necesidades del mundo, sólo si sientes de verdad la trascendencia positiva de tus actos puedes llegar a experimentar una profunda realización personal.
Me viene a la mente la historia de los dos albañiles que estaban construyendo un muro. A ellos se les acercó un hombre y les preguntó qué hacían.
Uno de ellos dijo:
“Básicamente, pongo un ladrillo encima de otro. Vamos un rollo”
El otro, de un modo muy distinto expresó:
“Ayudo a construir una escuela para que los niños estudien y sean personas de provecho el día de mañana.”
Obviamente la actividad es la misma, pero la experiencia es muy distinta cuando sientes que tu trabajo está al servicio de un bien para los demás.
LA REALIZACIÓN PERSONAL EN TU REINVENCIÓN PROFESIONAL
La realización personal, más allá de ofrecer servicio o de hacer aquello que te apasiona, está relacionada con sentir que posee significado.
A todos nos gusta ayudar a crear un impacto positivo para contribuir en algo que creemos profundamente.
No importa la magnitud del acto; si creemos que va a trascender de manera positiva experimentamos una sensación de orgullo y congruencia que nos hace sentir realizados.
Y esa idea de transformación positiva puede activarnos de manera apasionada y despertar en nosotros una misión con la que contribuir al mundo.
Una misión que está por encima de lo económico. Una idea con la que sentimos un profundo compromiso y responsabilidad por la que estamos dispuestos a movilizarnos.
Este es el caso de extraordinarias personalidades como Gandhi o la Madre Teresa. Con su misión consiguieron realizar un impacto tan grande en el mundo que ha pasado a la historia.
Esta es la idea que mueve a muchos voluntarios a trabajar sin remuneración ni expectativas de reconocimiento para contribuir a crear un mundo mejor.
Tener una misión en tu trabajo contribuye enormemente a experimentar realización personal Clic para tuitear
Sin embargo, la misión no tiene por qué ser algo notable, o socialmente admirable.
Todos los padres sienten cada día la misión apasionada de contribuir de forma positiva a la vida de sus hijos.
Está en nuestra naturaleza trascender a través de nuestra descendencia. La recompensa esperada no es en ningún caso económica.
El beneficio reside en el sentimiento de plenitud que se experimenta al dejar una huella positiva.
REINVENTARSE PROFESIONALMENTE Y GANAR DINERO CON PLENITUD PERSONAL
Por mucho que nos llene una actividad, hay que pagar facturas, por lo que volvemos al principio de esta historia.
El dinero juega un papel fundamental, porque con el amor con hambre no dura.
En mi opinión ocurre todo lo contrario.
Cuantas más personas ayudes a conseguir lo que ellas quieren, más impacto positivo tendrás en tu cuenta de resultados.
En contraposición, si “mendigas” trabajo para pagar tus facturas, obtendrás pocos ingresos, poca valoración por parte de tus clientes y muchos dolores de cabeza.
Si quieres reinventarte con éxito, tendrás que disponer de una mentalidad adecuada con respecto al dinero.
También habrás de reconocer tu potencial y tu valor:
Si no te crees capaz, no podrás hacerlo realidad. Clic para tuitear
Reinventarse profesionalmente a través de un proyecto que posee una misión con la que contribuir poniendo tus talentos al servicio de las necesidades del mundo y además ganarte bien la vida con ello, es posible.
Para ello has de olvidarte de ti y de tu producto, incluso de las oportunidades, y centrarte en crear un impacto positivo en la vida de las personas.
Sin duda es todo un reto.
Por eso quiero cerrar este artículo con dos recomendaciones que para mí son fundamentales para reinventarse profesionalmente con éxito.
1 VIVE SIN EXIGENCIAS
Mi primera recomendación es que no te obsesiones con encontrar esa mezcla perfecta. Sírvete de esta información para avanzar en la dirección que tu intuición te indica que es correcta.
Existe la tendencia exigente de buscar la excelencia y de dejar de disfrutar la vida por ello.
Se puede vivir de forma equilibrada y abundante con un trabajo, aunque no te realice del todo.
Al terminar tu jornada puedes dedicarte a una actividad que te apasione. O bien realizar actividades de voluntariado con las que sientas que contribuyes a hacer un mundo mejor. es una forma de probar
No te empeñes en encontrar la manera de hacer que todo encaje en tu proceso de reinvención profesional. Diseña una estrategia que te permita vivir desde hoy de la forma más plena posible.
2 VIVE CON CONGRUENCIA
Reinventarse profesionalmente empieza por reinventarse personalmente.
Y esto último es tan simple como empezar a darle total congruencia a tus actos.
Para conseguirlo has de evitar hacer cosas que no tienen nada que ver contigo y consumen tu energía.
Tu naturaleza es sabia y te muestra el buen camino. No te enfoques en el resultado porque no es lo importante.
Nadie al alcanzar la cima se siente realizado por ello el resto de su vida.
Así pues, si no estás a gusto allá donde estés, cambia de lugar del mismo modo que, al sentarte, cambiarías una silla “coja”.
Y sobre todo, sal a bailar cuando la vida te tienda la mano para disfrutar de ella.
Porque “dejar de hacer” es el mayor de los errores.
No hacer aquello que sientes que debes, te llevará al arrepentimiento, y ese es un callejón sin salida.
Si has de temer a algo, que sea a arrepentirte en el futuro por no haberlo intentado. Clic para tuitear
Así que si quieres reinventarte profesionalmente con éxito pasa a la acción; explora quién eres, en qué destacas de un modo natural y averigua qué te mueve.
Crea un proyecto que esté al servicio de los demás y de tu propia vida.
Cuando lo hagas culminarás tu proceso de reinvención profesional, dotando de abundancia y propósito tu vida.
¿cuáles son para ti los ingredientes necesarios para reinventarse profesionalmente con éxito?